Si tienes la suerte de caer en el minibús rodeado de alumnos no pierdas la oportunidad de aprender a contar hasta diez en turco, de aprender sus saludos, de aprender la alineación del Galatasaray y el Fenerbache....y de decirles que más vale que se aprendan los nombres de Henar, Alba, Raquel y Sara que son nuestras protas en este viaje, y que a mí me dejen tranquilo un rato que me tienen "jartito". Y así fue que las civilizaciones más alejadas del Mediterráneo entablan relación camino de Panaitolio. A mitad de camino no te pierdas la zanja gigante que han hecho los griegos para que el Peloponeso ya no se pueda considerar península sino isla, y así evitar ese rodeo tan tonto que tenían que dar los barcos camino de Italia.
Tras quince horas de viaje llegamos a nuestro destino, muy ilusionados sí, pero también un poquitín cansados, así que a la camita que mañana hay que madrugar.
Vaya interpretación las de nuestras chicas esta mañana!, la leyenda del Acueducto de Segovia hubiese acaparado el premio de la crítica y del público si esto fuera un concurso. Como no lo es se han tenido que conformar con los aplausos, que no es poco, del salón de acto del instituto de Panaitolio.
Y aplausos también para nuestras canciones infantiles. Desde aquí nuestro público agradecimiento las alumnas y a las profes de Educación Infantil que colaboraron con este bonito vídeo:
(jejee...I have a problem, que se diría por aquí. Resulta que esta mañana en vez de "copiar" el vídeo en el ordenador del insti le han dado a "cortar"...es decir, que ya no lo tengo. En cuanto lo recupere lo enseño, palabrita)
¡Qué gran ilusión poder seguir vuestra "odisea" particular en directo! En cuanto puedas quiero ver esas fotos del sirtaki y degustación de productos locales. Ya intuíamos que lo de Grecia iba a ser especial.Me alegro mucho por todos. ¡A disfrutar!. Kalimera, kalispera, kalinita.
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